Estos días son de esos en los que tenemos ``el tiempo´´ ese
que siempre echábamos en falta, y andábamos quejándonos de nunca tener.
Tiempo para reflexionar, parar y no dejar de pensar, para
sentir incertidumbre por lo que vendrá cuando acabe esto, ¿Dónde iremos a
parar? ¿Habrá más humanidad? ¿Volverán los valores y principios que se
perdieron años atrás? Aquellos años que nos tenían inmersos en un mundo repleto
de estrés, egocentrismo, prisa,… sin
dejarnos saborear las pequeñas y bonitas cosas de la vida. (Inevitablemente seguir
viviendo un poco en el futuro).
Como son ese café de la mañana, el poder ver, tocar, sentir…
a personas que queremos, los 10 minutos de ducha notando como recorre el agua
caliente en invierno por tu piel, y el placer de que pase a ser fría en verano,
2 palabras que a mí me encanta dar y recibir cada mañana ``buenos días´´ verdaderamente
siento que son una inyección de energía para empezar la jornada; y claro no puedo
dejar sin plasmar las magníficas ``buenas noches´´ (algo tan fácil de hacer y que
tan pocos aprecian), y que me decís de esa magia que tiene la tecnología nos puede
hacer sentir a mm a personas que se encuentran a km, y por supuesto la triste
ironía que no debemos permitir y es que hagan que nos ocurra justo lo
contrario, sentir a km personas que se encuentran a mm de nosotros, una mirada, un beso, un paseo, subirte al
coche y perderte, desconectar, simplemente… sentarte en cualquier lugar, cerrar
los ojos y escuchar a tu alrededor el maravilloso sonido de la naturaleza.
La vida nos fue convirtiendo en feas personas (no físicamente)
si no superficiales, de las que se quejan por todo, a las que no le importa que
le ocurra a su vecino, mientras su ombligo esté perfecto, un mundo repleto de
críticas que realmente no tienen sentido y se hacen por cualquier cosa, no me
quiero alargar más en esto, me encantaría que todo lo feo se quedara atrás.
Lo que de verdad me gustaría y espero de corazón que ocurra después
de esta maldita y trágica parada del mundo que ha traído tanta pena, y llevado
a tantas personas importantes para nosotros, y para la gente que nos rodea, familia,
amigos, conocidos, y no tanto, por cada uno de nosotros, nos sirva para valorar
y apreciar todo lo que no hicimos antes, aquello que antes pasábamos por alto. Creo
que la vida nos quiere dar una segunda oportunidad para llegar a ser mejores,
más humanos, más personas, menos máquinas, que aprendamos arriesgarnos dar el
cien de nosotros por lo que de verdad queremos y deseamos, dejar atrás el miedo, no
quedarnos con la duda, no dejar de lado la razón, pero si hacerle más caso al
corazón.
Yo no pienso volver a quedarme con las ganas, pienso arriesgar,
acelerar aun sabiendo que me puedo estrellar, salir de la zona de confort
teniendo claro que me podré equivocar, disfrutar cada segundo de todos los
momentos que me hagan feliz, no cambiaré, pero si pienso crecer, seguir
desarrollando esas habilidades que me hagan bien como puede ser la asertividad,
cuidar a las personas de siempre, y las que han ido apareciendo por casualidad y
me suman, y aceptar que existen otras que se marcharán, yo decido VIVIR
¿Y tú? ¿Qué vas a decidir cuando acabe esta maldita etapa? VIVIR
o seguir derrochando el tiempo. Piénsalo ahora que por desgracia tenemos ese
´´tiempo´´ que tanto soñamos, que nos ha sorprendido a todos y que por supuesto
nadie esperábamos que saliera tan caro, aprende y crece, de todo aquello que
sucede a tu alrededor.